Suele decirse que lo que no está presupuestado no existe. Y lo mismo aplica cuando no se asigna el presupuesto suficiente para realizar una tarea. Garantizar los derechos de las personas no es una excepción. 

 

La Ley General para Prevenir, Investigar y Sancionar la Tortura y Otros Tratos o Penas Crueles, Inhumanos o Degradantes de 2017 y la Ley General en Materia de Desaparición Forzada de Personas, Desaparición Cometida por Particulares y del Sistema Nacional de Búsqueda de Personas de 2018 y establecieron obligaciones muy importantes para las instituciones del Estado mexicano, obligaciones que requieren, además de compromiso político, un compromiso presupuestal. 

​

¿Cuánto se necesita para encontrar a las personas desaparecidas? ¿Cuánto para garantizar los derechos de las víctimas de tortura? ¿Cuánto para lograr que no haya más víctimas?

​

Para resolver estas preguntas, Fundación GEA, gracias al generoso apoyo del pueblo de Estados Unidos a través de la Agencia de los Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (USAID), a través de su proyecto EnfoqueDH, se dio a la tarea de desarrollar una herramienta para calcular el presupuesto que se necesita para implementar plenamente las leyes generales en materia de tortura y desaparición. Para ello, se identificó a la población objetivo, los procesos que implica cada ley, sus indicadores de desempeño y los principales costos asociados. Y a partir de este análisis, se creó una hoja de cálculo sencilla que permite que funcionarios/as, personas y organizaciones de la sociedad civil interesadas puedan ir estimando el presupuesto necesario conforme la situación vaya evolucionando--y, sobre todo, conforme se vaya recopilando la información que hoy en día no está disponible. 

 

Esperamos que este proyecto pueda complementar los esfuerzos que ya se están realizando y, sobre todo, que contribuya a fortalecer capacidades en las instituciones gubernamentales, así como de la sociedad civil para mejorar los procesos de planeación, programación, evaluación e incidencia. 

​

Agradecemos profundamente la colaboración de funcionarias y funcionarios públicos, así como de quienes integran organizaciones de la sociedad civil que compartieron su invaluable experiencia con nosotros y aportaron críticas y comentarios extraordinariamente útiles. Agradecemos también al equipo de EnfoqueDH, que nos ha apoyado enormemente a lo largo del proceso.